El melojo es un roble que rara vez supera los 25 m de altura, copa irregular y florece por abril, mayo o principios de junio.
El tronco es derecho o algo torcido con corteza cenicienta o pardo-grisácea y agrietada con el paso de los años. Sus hojas son simples alternas con lóbulos hendidos e irregulares. Tienen forma lanceolada o redondeada, borde entero o irregularmente dentadas.
Las flores se producen en gran número (se producen en abril, mayo o junio), en grupitos que cuelgan de las terminaciones de las ramitas. Madura y reparte los frutos por octubre o noviembre, las bellotas, tan apreciadas por los cerdos. Se cría en zonas mediteráneas, principalmente en las laderas y faldas de las montañas silíceas. Tienen estos árboles unos curiosos tumores o agallas que provocan en el árbol la picadura de los insectos. La madera no es de buena calidad; se utiliza sobre todo para postes, traviesas de ferrocarril, leña y carbón de buena calidad. Sus brotes tiernos son ramoneados por el ganado. Su principal aplicación es, en Extremadura y Andalucía, como alimento de los cerdos, para lo cual se suele explotar en las dehesas.
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